viernes, 16 de diciembre de 2016

741-770 PADRON VILLA HUEHUETENANGO- LADINOS


martes, 6 de febrero de 2018

MEMORIAS DE FRANCISCO DE ENZINAS-22-27

 MEMORIAS DE FRANCISCO DE ENZINAS
22 
MEMORIAS 
En Bruselas 
Los de Lovaina fueron grandemente sorprendidos por 
esta repentina persecución, aun aquellos que decían haber 
tenido más placer que otros en el Evangelio. Yo podría 
nombrar algunos, por cierto no de baja condición, que 
habiendo tenido antes la buena y verdadera religión, no 
conservaron señal o indicación alguna de verdaderos cris- 
tianos; así en esta leve ocasión, que ellos mismos busca- 
ban más que ella a ellos, demostraron ser verdaderos 
hipócritas. Tan grande es la debilidad del corazón huma 
no. Por mi parte, no podía aprobar su intención; y ellos 
también, sabiendo que yo venía de Alemania dijeron que 
estaba contaminado con no sé qué herejía, y no me vieron 
con buenos ojos. ¿Qué falta hace hablar más? Fuimos 
expulsados de nuestro albergue acostumbrado, y se nos 
dijo que nos arregláramos en alguna otra parte, a fin de 
que con nuestra presencia no nos pusiéramos en peligro 
nosotros mismos y a aquellos que nos recibieran. Yo me 
maravillé entonces de la inconstancia y ligereza de los 
hombres, y vi que el hombre no tiene virtud más grande, 
ni adorno más excelente de su vida, que el mantener la 
defensa de la verdadera religión con gran coraje y corazón 
invencible, testificar hasta el último suspiro contra los 
enemigos de la verdad, contra sus fraudes, tretas y vio- 
lencias; me hizo entonces un mal muy grande el ver 
gentes, que por lo demás no eran de las peores, perder su 
valor al primer soplo de la tempestad, y abandonar co- 
barde y villanamente su profesión de piedad. Por lo de- 
BRUSELAS 
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más, a fin de que mis amigos que yo bien hubiera querido 
ver en seguridad, no se hicieran sospechosos por su amor 
a mí, y a fin también de que, por demasiada temeridad no 
fuera a ponerme en peligro, determiné dentro de mí, que 
debía evitar el furor de los tiranos, y cuidar prudente- 
mente de hacer lo que fuera menester y las circunstancias 
exigieran. No quise retirarme a casa de mis parientes aun- 
que eran muchos y de mucha autoridad en la ciudad, 
porque dudaba de su fe y de sus sentimientos hacia mí, 
siendo los hombres tan vehementes y tan obstinados en 
apoyar las viejas costumbres. Por otra parte, no pensaba 
ir a ver a mis parientes de Amberes, a los cuales por carta 
les había hecho saber mi venida, hasta que ellos me llama- 
ran. A todo esto, decidí ir a Bruselas, donde no era yo tan 
conocido como en otras partes, y esperar allá hasta que 
recibiera ciertas noticias. Pero al llegar allá, oí de inme- 
diato que reinaba una confusión no menor que la que ha- 
bía dejado en Lovaina. Alguien me dijo que allí también 
había sido apresada gran cantidad de personas, de las 
mejores de toda la ciudad, y que muchos, dejando sus 
familias, habían huido; que sus bienes habían sido con- 
fiscados; que muchos se habían ocultado en lugares se- 
cretos; que se tenían por escrito los nombres de más de 
trescientos, de los que eran más sospechosos, y que se 
estimaba que en breve serían apresados en Bruselas y en 
todas las otras ciudades de Brabante y de Flandes. Aquí 
veis, Monseñor y maestro, algún rasgo de la vida de los 
apóstoles. Nuestro Señor Jesucristo declara que las zorras 
tienen cuevas y las aves nidos a los cuales acogerse. No 
debe ser para nosotros extraño, ni cosa deshonesta, el 
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MEMORIAS 
parecemos en todo a nuestro Salvador, atentos a que, si 
queremos ser sus discípulos, debemos en todo asemejarnos 
a él. Viendo, pues, que allí no había la más mínima 
esperanza de reposo o tranquilidad, resolví incontinenti 
volver a Lovaina, disponiéndome a cumplir allí mi deber 
y recibir lo que pluguiera a Dios enviarme. Mas la cosa 
salió mejor de lo que yo había esperado. Todos me des- 
aconsejaban el mostrarme en público; pero, contra la 
opinión de todos, me dirigí a nuestros españoles. Mis pa- 
rientes y antiguos amigos que estaban en la ciudad, me 
recibieron muy humanamente. Había también otros mu- 
chos que antes había conocido, los cuales, siendo amigos 
y familiares de mis parientes, trataron por todos los 
medios de hacer amistad también conmigo. Todos me 
honraban, todos se esforzaban hasta el cansancio por 
agradarme, contra todas mis esperanzas y las de muchos 
otros. Al principio me asaltaron algunas sospechas de 
que esa amabilidad, que por entonces mostraban hacia mí 
contra su natural costumbre, encubriera alguna traición, 
y que estuvieran preparándome alguna emboscada secreta. 
Pero habiendo percibido por algunas señales que no tenía 
nada que temer de ellos, y que en sus corazones me abra- 
zaban y acariciaban como lo hacían por fuera, comencé a 
estar un poco más seguro y a quererlos sobrepasar en 
placer y honestidad. Mientras tanto, mi tío de Amberes 
envió a Lovaina uno de sus amigos, por el cual y por 
cartas muy amables, demostraba alegrarse por mi venida 
y me mandaba que fuera a encontrarme con él. Lo que 
hice tanto más gustosamente cuanto que por entonces era 
peligroso permanecer en Lovaina. Allá también mis pa- 
rientes y amigos me abrazaron y recibieron muy ama- 
PERSECUCIONES EN LOVAINA 
25 
blemente, de suerte que por ese lado todo marchó muy 
bien, a Dios gracias. Habiéndome así regocijado allí varias 
semanas con mis parientes, volví a Lovaina, cuando la 
causa de los pobres misioneros estaba sobre el tapete, y 
se desarrollaba muy calumniosamente. 
Persecuciones en Lovaina 
Todos los días los doctos teólogos, especialmente 
Latomo y el Decano, cuya reputación es superior a la 
de los demás, venían a la prisión para atormentar con 
sus disputas a esas pobres mujercitas prisioneras. Ved, 
os ruego, Monseñor, cómo desciende la majestad teológi- 
ca: que tales personajes, que quieren ser considerados 
como los pilares sobre los cuales descansa la Iglesia, no 
tienen vergüenza de tomar como contrincantes a pobres 
mujeres ignorantes, para discutir con ellas de religión. 
Pues no penséis que van allí a predicar, como doctores, o 
para conducir con dulzura y caridad a las extraviadas a un 
camino mejor de religión;: mas considerad que van como 
al combate, y que asaltan a esas pobres gentes rudas e 
ignorantes, con tretas, con engaños, con artificios y otras 
sutilezas, para, después de haberse atribuido la victoria, 
triunfar de ellas en la ciudad por una cruel condena. ¡Oh 
triunfadores, que con más derecho deberían ser llamados 
trupheurs, como dicen ellos mismos. Y, sin embargo, 
tenían que venir completamente equipados y enjaezados 
para asaltar a esas pobres mujeres, si no lograban vencer- 
las con buenas razones y argumentos. Al contrario, fre- 
cuentemente han vuelto a sus casas burlados y convictos 
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MEMORIAS 
de desatinos e impiedad. Algunas de las pobres mujeres 
prisioneras más jóvenes, y menos ejercitadas en las Sa- 
gradas Escrituras y las discusiones eclesiásticas, puesto que 
podrían más fácilmente ser engañadas por sus tretas y 
sutilezas, defendían su causa con el silencio y la modestia. 
Otras, más avisadas, volvían los argumentos de los teó- 
logos contra ellos mismos, no sin gran deshonra e igno- 
minia de todo el orden teológico, ya que los principales 
volvían de la disputa, o derrotados por mujeres, o por lo 
menos confundidos; pues tan descarados son que no se 
dejan vencer jamás con palabras. Cuyo rumor se expandió 
incontinenti por toda la ciudad. Entre otras, la esposa de 
un boticario, interrogada acerca de la invocación de los 
santos, a saber, si no había que adorarlos e invocarlos, 
respondió que ella era muy poco ducha en disputas, y 
que por lo tanto dejaba todas las sutilezas a los teólogos, 
pero que en cuanto a toda forma de invocación, ella no 
sabía ni quería otra cosa que lo que enseñaban las Sagra- 
das Escrituras, a saber, lo que Jesucristo nos manda en 
San Mateo, capítulo 4: que es necesario adorar a Dios 
nuestro Señor y servirle sólo a él. Además, que ella había 
leído en San Pablo que no hay más que un Mediador 
entre Dios y los hombres: Jesucristo, quien se entregó a 
sí mismo por nuestros pecados, y que oye nuestros sus- 
piros y presenta nuestras oraciones delante del Padre; que 
ella se había propuesto en su espíritu adorar e invocar a 
Aquel que (según la palabra de San Pablo dirigida a 
nosotros) es el Santo de los santos; y que no osaba for- 
jarse o inventar en su mente un nuevo servicio, distinto 
del que la Palabra de Dios nos enseña, o contrario a ella, 
PERSECUCIONES EN LOVAINA 
27 
principalmente en cosa de tan grande importancia corno 
es la invocación, que es el punto principal de toda nuestra 
fe, y única que separa a la verdadera religión cristiana de 
la de los turcos y otros idólatras. Si ellos supieran alguna 
cosa mejor, que les enseñasen, la escucharían y aprende- 
rían de buena gana. 

miércoles, 7 de marzo de 2018

BENDICIONES 8 MARZO DIA INTERNACIONAL -MUJERES


BENDICIONES 

 DIA INTERNACIONAL DE LA MUJER

SALUDOS Y BENDICIONES PARA LAS MUJERES DE TODO EL MUNDO
UNO DE LOS MAYORES  ELOGIOS A LA MUJER SE ENCUENTRA EN LAS PAGINAS DE LA SAGRADA BIBLIA
31:10 Mujer virtuosa, ¿quién la hallará? 
Porque su estima sobrepasa largamente a la de las piedras preciosas. 
31:11 El corazón de su marido está en ella confiado, 
Y no carecerá de ganancias. 
31:12 Le da ella bien y no mal 
Todos los días de su vida. 
31:13 Busca lana y lino, 
Y con voluntad trabaja con sus manos. 
31:14 Es como nave de mercader; 
Trae su pan de lejos. 
31:15 Se levanta aun de noche 
Y da comida a su familia 
Y ración a sus criadas. 
31:16 Considera la heredad, y la compra, 
Y planta viña del fruto de sus manos. 
31:17 Ciñe de fuerza sus lomos, 
Y esfuerza sus brazos. 
31:18 Ve que van bien sus negocios; 
Su lámpara no se apaga de noche. 
31:19 Aplica su mano al huso, 
Y sus manos a la rueca. 
31:20 Alarga su mano al pobre, 
Y extiende sus manos al menesteroso. 

31:21 No tiene temor de la nieve por su familia, 
Porque toda su familia está vestida de ropas dobles. 
31:22 Ella se hace tapices; 
De lino fino y púrpura es su vestido. 
31:23 Su marido es conocido en las puertas, 
Cuando se sienta con los ancianos de la tierra. 
31:24 Hace telas, y vende, 
Y da cintas al mercader. 
31:25 Fuerza y honor son su vestidura; 
Y se ríe de lo por venir. 
31:26 Abre su boca con sabiduría,
Y la ley de clemencia está en su lengua.
31:27 Considera los caminos de su casa, 
Y no come el pan de balde. 
31:28 Se levantan sus hijos y la llaman bienaventurada;
Y su marido también la alaba: 

31:29 Muchas mujeres hicieron el bien; 
Mas tú sobrepasas a todas. 
31:30 Engañosa es la gracia, y vana la hermosura; 
La mujer que teme a Jehová, ésa será alabada. 
31:31 Dadle del fruto de sus manos, 
Y alábenla en las puertas sus hechos.

jueves, 1 de marzo de 2018

ESPAÑOLES SIN PATRIA Y LA RAZA SEFARDI- 1905

 ESPAÑOLES SIN PATRIA 
 Y LA RAZA SEFARDI
Dr. ANGEL PULIDO FERNANDEZ
Madrid, España
1905 

  Otra declaración, y acabamos. 
Nadie tiene por qué indagar nuestra filiación religiosa: la 
publicamos, desde luego. 
Somos cristianos; descendemos de cristianos viejos, y espe- 
ramos que nuestros hijos practiquen la religión de Cristo, en 
la cual fueron educados. 
Pero la rehgión del Crucificado es de paz, de caridad y de 
esperanza; no de guerra, de sevicia y desesperación. En esto se 
diferenciaron esencialmente el cristianismo y el islamismo. 
Mahoma no predicó, sino que impuso con sus ejércitos. 
Jesucristo jamás impuso, sino que persuadió con su palabra. — 
Mahoma enarboló el estandarte del guerrero y paseó sus hues- 
tes asoladoras por los pueblos, blandiendo las tajantes cimita- 
rras tintas en sangre. Jesús mandó sus apóstoles entre los gen- 
tiles como ovejas entre lobos, y ordenó á Pedro que envainase 
la espada apercibida á la defensa.— Mahoma dijo en el Corán: 
«Cuando encontréis á los infieles combatidles hasta hacer 
grande mortandad, y apretad los hierros de los cautivos que 
hayáis hecho.» Jesús dijo en el Calvario, donde pereció huma- 
namente, que moría por el consuelo y la gloria del género 
18 
humano, y que su padre era el Dios del perdón y de la miseri- 
cordia. 
Así, pues, sinceramente advertimos que esta obra aspira á 
la reconstitución y al engrandecimiento de la patria, por los ca- 
minos del amor y de la esperanza; y que á su logro acomodare- 
mos la doctrina y el estilo. 
SEFARDISMO EN GENERAL 
CAPÍTULO PRIMERO 
Sefarditas y Aschkenasitas. — Aristocracia sefardita. — Su belleza étnica, — Errores 
y supersticiones vulgares. —La consaguinidad hispano-judía. — Distribución 
geográfica de los sefarditas en Europa, África, Asia y América. — Multiplicación 
providencial de la raza. — Ideas generales sobre su censo. 
Sephard, ó sefarad, es un vocablo que designa en lengua 
hebrea á la península ibérica: á Castilla, Aragón, León, Nava- 
rra, Portugal..., y derivados de él son los nombres sefardim, 
sefarditas ó sefaraditas (1) — pues de estas tres, y aun de otras 
maneras le hemos leído — con los cuales se expresa la naciona- 
lidad histórica, ó procedencia, de una gran rama del pueblo 
hebreo: la española y portuguesa. La otra rama es llamada 
aschkenazim, asJcenasim 6 asquenasitas; y designa á los israeli- 
tas establecidos en países germanos y eslavos. 
Ambos nombres expresan además, por ampliación, los dos 
grandes ritos, ó sectas, en que se divide la religión hebrea; y 
sucede, por mezclas geográficas naturales, que á veces hay 
entre los hebreos de rito sefardita algunos que no son oriun- 
dos de Iberia, sino que proceden de otros lugares. 
(l) Siendo .sefardí el singular hebreo, al españolizarse este vocablo nuestro 
plural debe ser sefardíes, ó sefaradíes. Las palabras rubí, bisturí, borceguí, hurí, 
etcétera, hacen rubíes, bisturíes, borceguíes y huríes.
20 
Por regla general los sefarditas son de origen español, y 
hablan castellano; pero acontece también en algunas regiones 
que, con el transcurso del tiempo 3' el predominio de los idio- 
mas indígenas, aquél ha desaparecido. Así se observa, por 
.ejemplo, en el interior de Marruecos, y algunas poblaciones de 
Siria y de Palestina, donde los hebreos descienden de los 
expulsados de España, practican el rito sefardí^ y hablan 
solamente el árabe ó el turco, desconociendo en absoluto el 
castellano. Sin embargo, todavía allí  usan, en ciertos actos re- 
ligiosos, algunas oraciones y frases, ó formulan algunas ofertas 
en español, las cuales vienen á ser (según expondremos más 
adelante) rarísimos vocablos fósiles que atestiguan la existen- 
cia, en remotos tiempos, de una lengua viva ya desaparecida, 
sin dejar más que ese leve rastro. 

miércoles, 24 de enero de 2018

MARIA GOMEZ-LA REFORMA EN ESPAÑA Samuel Vila


HISTORIA DE
LA INQUISICIÓN Y
LA REFORMA EN ESPAÑA
Samuel Vila
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2. María Gómez y sus familiares.



María Gómez, la enferma mental recogida por el sacerdote Zafra, que había denunciado a los reformados de Sevilla a la Inquisición, recobró después el uso de la razón y se apesadumbró de su loca traición, que sólo por la presencia de espíritu de Zafra no desencadenó la persecución en seguida.

Reintegrada María al seno de su familia, cuyos miembros eran convencidos reformados, y a la confianza de la congregación, por un tiempo no inferior a dos años, fue finalmente encarcelada en 1557, igual que los demás protestantes de Sevilla, junto con tres hijas suyas -Elvira, Teresa y Lucía- y una hermana –Leonor Gómez-, esposa del médico de Sevilla Fernando Núñez. La manera como los inquisidores se apoderaron de toda esta familia merece ser relatada.

 Una de las hijas de María Gómez había sido encarcelada antes de que lo fueran su madre y su hermana.

Los inquisidores, que abrigarían sus dudas respecto a la ortodoxia de su antigua y espontánea delatora, pidieron de la hija informes de las creencias de sus parientes, y la joven se resistió con firmeza a toda delación; ni siquiera la tortura le hizo decir una palabra. No convencidos, a pesar de sus negaciones, y con objeto de llegar al fin que pretendían, se valieron los jueces de otro medio.

Los próximos interrogatorios los verificó uno solo de los inquisidores, el cual dio a la joven muestras de simpatía, y le aseguró que sentía compasión por ella y que harta todo lo posible para salvarla. Repitió sus promesas durante varios días, dándole señales de vivo dolor por su desgracia, y cuando comprendió que habla ganado la confianza de su víctima, le hizo entender que su madre y hermanas se encontraban en gran peligro de ser presas, porque habla muchos testigos dispuestos a dar testimonio contra ellas. Que el amor que sintiera por ellas debía obligarla a confesarle todo lo que supiera de su madre y hermanas, para así poder tomar las medidas oportunas a fin de defenderlas y salvarlas de una muerte segura. La pobre muchacha cayó en el lazo y confesó al inquisidor lo que éste deseaba saber. Con esto terminó la conversación. El traidor hizo comparecer a la joven y confirmar ante el tribunal todo lo que le habla dicho. Inmediatamente fueron encarceladas su madre, sus hermanas "y su tía.

Las cinco fueron presentadas en este auto de fe y, después de él, conducidas a la hoguera.

 Antes de que las ataran a la estaca se arrodilló la joven causante de la ruina de esta familia delante de su madre y de su tía, pidiéndoles perdón por su involuntaria traición, y les dio gracias por la enseñanza que le habían inculcado en las doctrinas de Cristo, por la cual ahora con gozo iba a la muerte. «No a la muerte, hija mía -le contestó su tía-, sino a la vida eterna que por la gracia de Dios en Cristo estamos seguras de recibir.
 Las cinco mujeres se abrazaron las unas a las otras, mientras los familiares de la Inquisición permanecían mudos contemplando la escena.


Después las ataron a los postes y encendieron la leña.

sábado, 13 de enero de 2018

CELSO MUÑIZ. ASTURIAS-EVANGELIO

 Historia 
del Protestantismo en 
Asturias 
150 años de la Segunda Reforma protestante en España 
Manuel de León de la Vega 
Ex sacerdotes convertidos al Evangelio 
Celso Muñiz 
Dice Rubén Fernández en sus escritos sobre Ramón Blanco y su esposa 
Esther, que "fue por el año 1962 cuando el catolicismo asturiano 
experimentó otra tremenda sacudida. Porque inesperadamente (para el 
mundo católico) don Celso 
Muñiz, padre espiritual del 
Seminario de Oviedo y 
profesor del mismo centro, 
confesor de confesores, 
director espiritual de 
retiros en Covadonga, a 
quien los seminaristas 
llamaban "San Celso" dada 
su espiritualidad, se 
convierte a Cristo y ha de 
abandonar con urgencia la 
Iglesia Católica. Se dice 
que a consecuencia del 
hecho, el Arzobispo de 
Oviedo dimitió". 
Estudió por doce años 
en el Seminario 
Metropolitano de Oviedo, 
que eran los estudios clásicos de entonces: cinco de Latín y Humanidades, 
tres de Filosofía y cuatro de Teología. Sería también profesor de Ascética y 
Teología Mística, sin embargo nunca pudo por sí mismo lograr el 
autocontrol y la seguridad que enseñaba a otras personas a conseguir. Su 
conversión la describe así Celso Muñiz: "Nunca olvidaré la noche de mi 
conversión. Otro día de duro conflicto interior había terminado y busqué 
refugio en el Señor y en su Palabra, la Biblia. No podía dormir. No era 
tanto que yo tratara de orar, sino que la oración repentinamente invadió 
mi corazón y no la pude contener. Más que nunca antes sentí la carga y el 
peso de los pecados de mi vida pasada. Pensé: Soy totalmente pecador. 
Me sentí declaradamente abandonado y me preguntaba si alguna vez 
podía salir de ese estado... Nunca antes me había sentido tan incapaz de 
hacer algo bueno. Pensé en la cantidad de veces que el Señor Jesucristo 
había invitado a los que sentían completamente perdidos a venir a Él. Me 
sentí fuertemente arrastrado hacia Él porque me ofrecía perdón libre e 
inmerecido... Por fin, sin ningún deseo de hacer otra cosa por mí mismo, 
me arrojé a los brazos de mi Padre Dios, quien había dado a Jesucristo 
para mi salvación. Ore: "Ven a mí, Señor Jesús, me entrego a ti como mi 
único y suficiente Salvador personal"... No sé cómo ocurrió pero es un 
hecho que todas mis vacilaciones, dudas y titubeos desaparecieron y mi 
felicidad fue completa". 
Aparte de este testimonio personal que hemos encontrado en el libro 
citado "Lejos de Roma, cerca de Dios", se sabe que durante muchos años 
fue profesor en la Universidad de Amsterdam 227 . Su esposa 228 falleció en 
1995 y era conocido en toda Holanda su celo por las cosas de Dios. 
A propósito de la tesis doctoral de Celso Muñiz sobre el habla de 
Valledor, especie de gallego asturiano y que publicó en 1978, dice José 
García García en "A propósito del gallego asturiano 229 de Allande ":Así las 
cosas, no podemos menos de saludar con gran complacencia la reciente 
aparición de "la obra que nos ocupa, tesis doctoral defendida por su autor 
-valledorano, por cierto- en la Universidad de Ámsterdam. Y hemos de 
decir que la satisfacción que el libro nos produce no se debe tanto - 
aunque también- a lo que significa de respuesta a una necesidad como a 
la minuciosidad y al rigor con que se ha efectuado el trabajo, así como al 
227 Se conoce un libro publicado en esta universidad como tesis doctoral de 
Celso Muñiz. «El habla del Valledor. Estudio descriptivo del gallego asturiano de 
Allande (Asturias. España)». Academische Pers. Amsterdam. 1978. Otro 
protestante asturiano amante del habla de su tierra tiene el libro " Palatalización de 
la le- inicial en zona de habla gallega, RIDEA, agosto de 1948, de Lorenzo 
Rodríguez Castellano) 
228 Hemos recibido alguna información sobre la esposa de Celso Muñiz y 
sabemos que era profesora de Oviedo y por ella él se convertiría al Evangelio ya 
que antes también era su confesor. 
229 AO XXVII-XXVIII Págs 549-554 José García García-A propósito del 
gallego asturiano 
acierto que, a nuestro juicio, lo corona. Una introducción y tres partes 
estructuran el libro. En aquella se nos delimita el área geográfica -dentro 
del concejo allandino- correspondiente al habla objeto de estudio y se 
establece la distribución en las dos zonas (La Sierra y El Valledor) en las 
que se practican las dos variantes consideradas (con y sin palatalización, 
respectivamente, de la L- inicial y -LL- intervocálica latinas); para una 
primera y genérica caracterización de tales variantes se nos ofrece un 
cuadro comparativo de las mismas, en cuanto a determinados rasgos, con 
otras hablas gallegas y con la asturleonesa contigua, y se da cuenta del 
método y estructura del trabajo, no sin formular, en sustanciosas notas 
con interesantes y actualizadas referencias bibliográficas, importantes 
matizaciones sobre diversas cuestiones (como, por ejemplo, el concepto 
de fonema y la correspondencia, en el mismo, entre las vertientes física - 
fisofonema- y psíquica -psicofonema-). 
Este autor considera único el trabajo de Celso Muñiz, a la altura de lo 
que pudo representar Dámaso Alonso en Homenaje a Krüger, II, en sus 
« Notas gallego-asturianas de los tres Oseos», en Archivum, 230 VIII), o 
comportamientos diferenciales con respecto a las hablas contiguas para el 
establecimiento de fronteras dialectales o el acotamiento de áreas de 
intersección como ya lo había apuntado el protestante besullense 
profesor Lorenzo Rodríguez. Una nota simpática la encontramos en 
asturiano sobre el tema: "Celso Muñiz, el probe, nun puido ni tan sequeira 
publicar a súa teses en España, (bon pidaliano taba feito) Uvera que ir en 
1973 a Amsterdam a publicarla en Neerlandés. Preguntóme Eu, que 
carallo perderanse aos holandeses nel Valledor!!!!! " 
En la Universidad protestante de Ámsterdam, la llamada "Universidad 
libre", se ha venido enseñando español como asignatura secundaria desde 
1964 y han pasado por ella impartiendo enseñanza M.A. Nogales de 
Muñiz 231 que presentó su tesis sobre "Irradiación de Rosalía de Castro" 
dirigida por Van Praag en 1966 y la de Celso Muñiz bajo la dirección de la 
230 Archivum: revista de la Facultad de Filosofía y Letras, Volumen 44, Parte 
1 - Volumen 45, Parte 1 Autores Universidad de Oviedo. Facultad de Filosofía y 
Letras, Universidad de Oviedo. División de Filología, Universidad de Oviedo. 
Editor Universidad de Oviedo, 1994 
23 1 Revista de la Universidad Complutense Autores Universidad Complutense 
de Madrid, Madrid Publicado en 1984 
catedrática de lingüística de la misma Universidad. Suponemos que María 
Antonia Nogales de Muñiz sea también protestante porque Celso Muñiz 
era así reconocido. "Entre los ex alumnos distinguidos de De Wartburg es 
Celso Muñiz, un "auténtico convertido" como así lo denominó don Ramón 
Echarren. El ex director espiritual del Seminario de Oviedo, doctor en 
Teología ascética y mística ahora vive en Kampen -Holanda -". 232 No 
hemos podido encontrar más datos sobre este eminente profesor. 
232 The thirty thousand; modern Spain and Protestantism (Los treinta mil; la 
España moderna y el protestantismo) Autor Carmen Irizarry Editor Harcourt, Brace 
& World, 1966 

sábado, 13 de enero de 2018

JOSE FERNANDEZ- ASTURIANO CONVERTIDO AL EVANGELIO

 Historia 
del Protestantismo en 
Asturias 
150 años de la Segunda Reforma protestante en España 
Manuel de León de la Vega
ALGUNOS EX-SACERDOTES CATÓLICOS CONVERTIDOS EN ASTURIAS: 
José Fernández, del concejo de Quirós. 
Uno de los primeros sacerdotes convertidos al Evangelio es José 
Fernández del Concejo de Quirós. Su relato en "Lejos de Roma y cerca de 
Dios" comienza con una biografía íntima y conmovedora: "Nací ciego, no 
física sino espiritualmente, en 1899 en una de las regiones más 
montañosas e inaccesibles de Asturias, bien llamada "la Suiza española". 
Narra su peripecia personal como católico que tenía una fe ciega en 
Roma. "Dejé mi hogar a los doce años, para no volver a ver a mi padre, mi 
madre, mis hermanos y hermanas 225 . La gloria de la vida sacerdotal, los 
encantos del monasterio y la salvación de mi alma vislumbrados en el 
horizonte de mi mente superaban la natural tristeza que me sobrevino al 
dejar mi familia y el lugar de mi infancia". Ingresaría en un colegio de 
enseñanza media dirigido por sacerdotes en la provincia de Valladolid. Allí 
es postulado como candidato al sacerdocio, habiendo sido enviado a un 
noviciado dominico en Ávila donde a la edad de dieciséis años le 
impusieron el hábito de la orden de los dominicos. 
El noviciado le resultó penoso por la rígida observancia. Los 
sufrimientos y las pruebas eran constantes. Ayunos prolongados, cartas 
censuradas, no podía haber comunicación, la confesión era obligatoria 
todas las semanas, la ansiedad y la tortura mental solo encontraban el 
coraje necesario para resistirlo con el sueño de ser fraile. Ese día llegó el 8 
de septiembre de 1917. Los cuatro años siguientes los pasó en el Colegio 
Santo Tomás, contiguo al noviciado. A los cuatro años del colegio mayor, 
fue enviado a los Estados Unidos junto a diecisiete jóvenes seminaristas, 
para estudiar inglés y teología. Pasó tres años en el Seminario Teológico 
Dominico de Louisiana y algún tiempo en la Universidad de Notre Dame, 
siendo consagrado sacerdote en 1924. Sería destinado como ayudante en 
una de las grandes iglesias católicas de Nueva Orleans, Louisiana, donde 
sirvió por nueve años con gran éxito, por lo que fue nombrado Superior de 
la Casa de los dominicos. 
En los últimos años de parroquia había comenzado a dudar de algunas 
doctrinas de la iglesia católica romana. Dudaba del poder de perdonar los 
pecados, no lograba creer en la doctrina de la transustanciación y su fe 
comenzó a debilitarse. Durante año y medio sintió una lucha interior 
estando tentado a dar la espalda a Dios. Por un tiempo trabajó en la 
biblioteca de monasterio y en uno de los armarios aparecía la inscripción 
de "Libros prohibidos". Aquellos libros eran libros que trataban sobre las 
evidencias contra el catolicismo romano que se presentaba como 
verdadera iglesia de Cristo. Comenzó a leer la Biblia que hasta ese 
225 Por correspondencia tuvo bastante contacto con su sobrina Victorina 
Fernández esposa de Joaquín Moragrega, influyendo bastante en su conversión. 
Tiene esta hermana bastantes cartas y documentación de su tío José Fernández. 
momento no representaba nada relevante, pues se le había dicho que la 
mente humana no la podía comprender y por tanto necesitaba una 
autoridad infalible que la interpretase. Pero la semilla de la Palabra 
plantada en el jardín del alma comenzó a prender, crecer y dar fruto. 
Dando clases de Historia de la Iglesia a los jóvenes dominicos, se 
familiarizó con la corrupción de la iglesia de Roma y a la vez sintió una 
profunda admiración por los valientes líderes de la Reforma. Después de 
dos años de enseñanza en el monasterio no había hallado la paz y no 
quería seguir viviendo en aquel ambiente. 
Sabiendo que España estaba en Guerra Civil se enrola en el Ejército de 
los Estados Unidos como civil. Esta decisión la daría la oportunidad de 
poder escribir sobre su experiencia religiosa en el ejército. Después del 
entrenamiento básico, le enviaron al Centro de Entrenamiento de la 
Inteligencia Militar en Camp Ritcie, Maryland. Aunque los cabos y 
sargentos hacían la vida difícil en la Escuela de inteligencia, esos hombres 
le prepararían para su nuevo ministerio cristiano. Por un tiempo le 
asignaron a la oficina del capellán que resultó ser un ministro de la iglesia 
reformada holandesa que tenía un corazón de oro. Era también un orador 
fluido e interesante y un expositor lúcido en cuestiones doctrinales. Dice 
José Fernández: "Por primera vez comprendí que un ministro protestante 
podía ser feliz y sincero en su fe y su labor". En el ejército norteamericano 
no se proselitiza y por tanto su relación con el capellán era de cordialidad. 
Tampoco ponía objeciones a que se asistiera a sus servicios protestantes y 
un domingo que predicó sobre la salvación por la fe sola, iría a reclamar a 
dicho capellán el versículo de Santiago 2:24 "Vosotros veis, pues, que el 
hombre es justificado por las obras y no solamente por la fe". El capellán 
pacientemente le explicaría que la salvación por la fe sola, de la que habla 
Pablo, es solamente desde el punto de vista de Dios, que lee nuestra 
mente y ve nuestro corazón. Le seguiría explicando que era una fe de 
confianza y no una adhesión mental a doctrinas. Las buenas obras no son 
la raíz, son el resultado de la salvación. 
En 1944 sería asignado, José Fernández, como interprete para los 
oficiales sudamericanos en Fort Riley, Kansas. En ese tiempo entraría en 
contacto con el Ejército de Salvación, también en Kansas. El sermón lo 
daba una mujer con el uniforme típico del Ejército de Salvación, quien con 
un conmovedor mensaje terminó haciendo un llamamiento a los oyentes 
a creer por completo en el sacrificio de Cristo, citando las palabras de Juan 
5:24. Dice José Fernández: "En ese momento me sentí pasando de la 
muerte a la vida bajo la influencia de una fuerza sobrenatural. Caí de 
rodillas, confesé a Cristo como Señor de mi vida y lo acepté como mi 
salvador personal". ..."Desde el momento en que me había convertido en 
un creyente intelectual, seis meses antes de esta gloriosa experiencia del 
nuevo nacimiento, frecuentemente me solían asaltar dudas y temores y 
sueños nocturnos se convertían en pesadillas. Pero desde que me convertí 
en un creyente de corazón y me rendí completamente a los brazos 
extendidos del Salvador crucificado, no experimenté otra cosa que paz, 
tranquilidad y perfecta seguridad de los que confían en Jesús. ¡La vida 
para mi comenzó a los 44 años!". 
Camp Ritchie seguiría siendo la base militar permanente y muy cerca 
de este lugar se casaría y asistiría a la iglesia presbiteriana cuyo pastor era 
Rvd. C.P. Muyskens un compañero de estudios del capellán Kregel que, 
como él, pertenecía a la denominación reformada holandesa. El 24 de 
abril de 1945, estando aún en el Ejército, sería ordenado ministro 
presbiteriano en la iglesia de Hawley Memorial en Blue Ridge Summit. Dos 
meses después recibió la licencia honorífica del ejército de los Estados 
Unidos y ese mismo año entró en el Seminario Teológico de Princeton 
donde obtuvo el título de profesor de Teología. Termina José Fernández 
su testimonio diciendo que "durante cuarenta y cuatro años fui llevado al 
Sinaí donde oí los truenos de la ley en los ritos de la iglesia; pero todos los 
truenos no me pudieron convencer de mis pecados hasta el día en el que 
fui al Calvario y vi a mi Salvador colgado allí en mi lugar." Anota el 
comentarista y recopilador de estos testimonios "Lejos de Roma, cerca de 
Dios": "Después de su conversión era muy activo en el ministerio, 
especialmente en la costa oriental de los Estados Unidos y con su gente de 
habla hispana". 


viernes, 29 de diciembre de 2017

359-372 HISPANOAMERICANOS VILLA HUEHUETENANGO 1865

359
LADISLAO ZAMAYOA
SECUNDINO HERRERA
JOSE MAURICIO
360 IDEM
361
MARGARITA GRANADOS MORALES
13 JULIO 1865
ANICETO ZOSA HERNANDEZ
JUAN CASTILLO AGUIRRE
CARMEN LOPEZ MORALES
MARIANO YSABEL CASTILLO RIVAS
362
DANIEL DE JESUS LOPEZ MAZARIEGOS
JOSE MARIANO SAMBRANO
JOSE MARIA GALINDO RIOS
PORTADA
 367
TEXTO DE PRESV. JOSE MARIA MUÑOZ
INDICE
372
DANIEL DE JESUS MORALES
BALBINO DE JESUS LOPEZ ARRIAGA
373

artes, 31 de julio de 2018

OH, JERUSALÉN-Prólogo

 OH, JERUSALÉN
Dominique Lapierre & Larry Collins  
Título original: O JERUSALEM
Traducción de JUAN MORENO
Diseño de la colección de ESKENAZI & VIANO
Primera edición en esta colección: Mayo, 1982
© Larry Collins and Pressinter, S. A., 1971 © 1972, PLAZA & JANES, S. A., Editores
Virgen de Guadalupe, 21-33 Esplugues de Llobregat (Barcelona)
Printed in Spain — Impreso en España ISBN: 84-01-49015-4 — Depósito Legal: B. 19.552 -
1982
Impreso por Litografía Roses, S. A, Escultor Canet, 6-8-10. Barcelona-28


PRÓLOGO
Aquella tarde de mayo de 1948, el lamento de las gaitas se extendió por última vez en el laberinto
de viejas callejuelas. Anunciaba la salida de los soldados británicos que habían ocupado la vieja ciudad
de Jerusalén. Impasibles, marchaban silenciosos en grupos de ocho o diez, y el martilleo de sus
borceguíes punteaba la melodía. Encuadrando a cada grupo, dos hombres, metralleta en mano,
vigilaban atentamente las fachadas y terrazas del universo hostil que atravesaban.
En las ventanas o en los umbrales de las sinagogas y escuelas religiosas de la calle de los Judíos,
los viejos de luengas barbas contemplaban el desfile. Durante tres mil años, sus antepasados habían
visto partir a muchos otros ocupantes: asirios, babilonios, persas, romanos, cruzados, árabes y turcos.
Hoy les tocaba el turno, a los militares británicos, de abandonar aquellas murallas tras un triste reinado
de treinta años. Pálidos y encorvados por una existencia dedicada por completo al estudio, aquellos
ancianos encarnaban la perennidad de la presencia judía en Jerusalén. Rabinos, talmudistas o doctores
de la ley, parcela casi olvidada de la comunidad dispersa, habían sobrevivido de siglo en siglo. Habían
santificado el día del sábado y regulado cada acto de sus pobres vidas según los preceptos sagrados. Se
habían aprendido de memoria los versículos de la Tora y copiado de nuevo cuidadosamente los textos
del Talmud, que se transmitían de generación en generación. Cada día acudían a postrarse ante el Muro
de las Lamentaciones, implorando al Dios de Abraham que hiciera regresar a su pueblo a esta tierra de
la que había sido expulsado. Nunca este día pareció más próximo.
De hecho, otras miradas espiaban ¡a columna de soldados extranjeros. Emboscados al abrigo de
sacos terreros que obstruían determinadas ventanas o tras invisibles aspilleras dispuestas en las
venerables fachadas, los vigías judíos esperaban, armados con metralletas y granadas rudimentarias.
Dentro de poco, cuando desapareciese el último soldado, se lanzarían hacia las posiciones británicas
abandonadas, una media docena de casas fortificadas que defendían el barrio judío de los ataques
procedentes de los barrios árabes que lo rodeaban.
Cuando el último destacamento británico llegó al final de la calle, torció hacia la izquierda, para
subir por una callejuela que conducía al imponente cercado del patriarcado armenio. Se detuvo cuando
llegaron ante el arcén de piedra que coronaba la entrada del número 3 de la calle Or Chayim.
En su despacho, con las paredes repletas de libros viejos y objetos religiosos, el rabino Mordechai
Weingarten, la más alta autoridad del barrio, había pasado la tarde en compañía de sus textos sagrados.
Absorto en su meditación, tardó un momento antes de responder al golpe dado en la puerta. Se levantó
al fin y, tras ponerse el chaleco y la levita negros, se ajustó sus gafas con montura de oro, cogió su
sombrero y salió. En el patio, un oficial, con las insignias amarillas y rojas del «Suffolk Regiment», le
esperaba para entregarle una gran llave. Era la llave de la puerta de Sión, una de las siete puertas de
Jerusalén.
Desde el año setenta hasta hoy declaró el oficial, ninguna llave de Jerusalén ha estado en
manos judías. Es, pues, la primera vez en diecinueve siglos que su pueblo obtiene este privilegio.
Weingarten alargó una mano trémula. La leyenda quiso que la noche en que el emperador romano
Tito destruyera el templo de los judíos, sus sacerdotes lanzaran las llaves de Jerusalén hacia el cielo gritando: «¡Que Dios sea en adelante el guardián de estas llaves!»
El oficial británico se cuadró y saludó. Nuestras relaciones no han sido siempre fáciles, pero
separémonos como buenos amigos añadió. Buena suerte y adiós.
¡Bendito seas murmuró Weingarten, oh, Dios, que nos concedes la vida y el pan y nos has
permitido ver este día!
Después, dirigiéndose al inglés, añadió: En nombre de mi pueblo, acepto esta llave. El oficial
dio media vuelta y ordenó retirarse a sus hombres. El crepúsculo cubría ya de sombras la ciudad.
5
Pronto, un nuevo ruido sucedió al lamento de las gaitas. Se desvanecía la alegría del rabino que apretaba
entre sus dedos la llave de la puerta de Sión. Este ruido venía a recordarle cuan frágil era el derecho
del pueblo judío a vivir en aquella ciudad, y cuan ilusoria podía revelarse la posesión. Una vez más,
Jerusalén se iba a convertir en campo de batalla. Sus muros sólo pertenecerían a aquellos que supieran
conquistarlos y guardarlos. En la creciente oscuridad, el ruido se multiplicaba. Desgarrador y siniestro,
pronto pareció venir de todos los rincones de la ciudad. Era el crepitar de las balas.
A cada silbido, la joven árabe bajaba la cabeza y apresuraba el

741-BERNARDA MENDOZA- LADINA- SOLTERA
1745 68 AÑOS
742-JOSE MENDOZA- LADINO
1769 44 AÑOS
743-SIMONA  MENDOZA-LADINA
1775 38 AÑOS
744-MARTA  MENDOZA-LADINA
1797 16 AÑOS
745-EUSTAQUIO MENDOZA- LADINA
1803 10 AÑOS
746-PEDRO MENDOZA-L ADINO
1808 5 AÑOS

747-MANUELA CARDON - MESTIZA- VIUDA
1743 70 AÑOS

748-NORBERTO CARDON- MESTIZO- CASADO
1781 32 AÑOS
749-JOSEFA HERRERA -MESTIZA
1791 22 AÑOS
750-MARIANO  CARDON HERRERA.MESTIZO
1811 2 AÑOS
751-MARIANA -HERMANA -MESTIZA
1797 16 AÑOS

752-VICTORIANO HERRERA MESTIZO- CASADO
1785 28 AÑOS
753-FLORENCIA ALVARADO MESTIZA
1791 22 AÑOS

754-GUILLERMO LOPEZ MESTIZO- CASADO
1769 44 AÑOS
755-THOMASA LOPEZ -MESTIZA
1779 34 AÑOS
756-CATARINA LOPEZ LOPEZ- MESTIZA
1797 16 AÑOS
757-MANUELA  LOPEZ LOPEZ-MESTIZA
1803 10 AÑOS
758-DOMINGA LOPEZ LOPEZ- MESTIZA
1805  8 AÑOS

759-MARIANO ALFARO -MESTIZO- CASADO
1778 35 AÑOS
760-JOSEFA PALACIOS -MESTIZA
1781 32 AÑOS
761-JULIA ALFARO PALACIOS- MESTIZA
1797 16 AÑOS
762-FRANCISCO ALFARO PALACIOS- MESTIZO
1799 14 AÑOS
763-THOMASA ALFARO PALACIOS-  MESTIZA
1802 11 AÑOS
764-MARIANO ALFARO PALACIOS- MESTIZO
1803 10 AÑOS
765-MARIA ALFARO PALACIOS-MESTIZA 
1804 9 AÑOS
766-CATARINA ALFARO PALACIOS- MESTIZA
1805 8 AÑOS
767-DIONICIO ALFARO PALACIOS-MESTIZO
1806 7 AÑOS
768-FACUNDA ALFARO PALACIOS- MESTIZA
1807 6 AÑOS
769-HILARIA ALFARO PALACIOS- MESTIZA
1809 4 AÑOS
770-ONESIFORO ALFARO PALACIOS- MESTIZO
1809 2 AÑOS

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